Caída Libre de las Acciones de ThyssenKrupp: ¿Un Camino sin Retorno?
Las acciones de ThyssenKrupp, el gigante industrial y siderúrgico alemán, han sufrido una drástica caída en el último año, perdiendo un 53% de su valor en Bolsa. A pesar de que algunos analistas aún recomiendan comprar y el precio objetivo promedio está un 120% por encima del valor actual, la compañía atraviesa un periodo de incertidumbre que podría seguir afectando su cotización. Los resultados financieros han sido decepcionantes, y las expectativas futuras no parecen prometedoras.
Resultados Financieros Desalentadores en el Tercer Trimestre
En el tercer trimestre fiscal, ThyssenKrupp volvió a registrar pérdidas, afectado por la desaceleración en sectores clave como la automoción, la ingeniería mecánica y la construcción. La compañía ha revisado a la baja sus previsiones tres veces este año y ha anunciado nuevas medidas de reestructuración, que incluyen la eliminación de cientos de puestos de trabajo en Alemania. Mientras tanto, el plan para reorganizar su negocio de acero sigue sin definirse.
Pérdida del 50% en el Valor de las Acciones
Las acciones de ThyssenKrupp han perdido la mitad de su valor desde principios de 2024, situándose entre las más débiles del índice MDax. Los analistas de Baader Bank no prevén una mejora inmediata, señalando que las continuas salidas de efectivo, los costes inciertos de la transformación y la falta de decisiones sobre el futuro de la división siderúrgica son factores que mantienen el sentimiento negativo en el mercado.
Detalles de las Pérdidas Financieras
En el tercer trimestre, la empresa reportó pérdidas de 54 millones de euros, comparado con una ganancia de 83 millones en el mismo periodo del año anterior. Este resultado se vio afectado por costes adicionales en antiguos proyectos y la desconsolidación de su participación en ThyssenKrupp Industries India. Las ventas cayeron un 6% hasta los nueve mil millones de euros, y los beneficios ajustados antes de intereses e impuestos disminuyeron casi un 40%, alcanzando los 149 millones de euros.
La División de Acero: Un Pilar en Crisis
La división de acero de ThyssenKrupp, que solía ser uno de los pilares de la empresa, también sufrió un duro golpe, con una reducción de ganancias del 50%, quedando en 100 millones de euros. Esta situación refleja la crisis en el sector, agravada por los altos costes de energía, la baja demanda y la competencia de las importaciones asiáticas.
Reestructuración en el Negocio de Proveedores de Automoción
En cuanto al negocio de proveedores de automoción, ThyssenKrupp ha iniciado una reorganización en la construcción de carrocerías, lo que resultará en la pérdida de hasta 400 empleos en Alemania, principalmente en la planta de Lockweiler, mientras que se ampliarán las capacidades en otras ubicaciones fuera del país. Este proceso se completará por etapas hasta finales del ejercicio 2024/2025.
Futuro Incierto para la División de Acero
Por otro lado, la empresa ha detenido temporalmente la venta de su división de Ingeniería de Automatización y está explorando diferentes opciones para su negocio de transmisiones en Bremen, que podrían incluir medidas estructurales profundas. Aunque aún no se ha decidido si esto implicará el cierre de la división, se espera una resolución antes de que finalice el año fiscal.
El futuro del negocio del acero sigue siendo incierto. Aunque ThyssenKrupp planea escindir esta división y vender el 50% a la empresa propiedad del multimillonario checo Daniel Kretinsky, las negociaciones están en curso. El objetivo, según la dirección, es que la división de acero opere de forma independiente y sea financieramente viable.
Análisis Técnico: ¿Es Posible un Rebote?
En cuanto al comportamiento de las acciones de ThyssenKrupp en Bolsa, el indicador RSI se encuentra en niveles de sobreventa, los más bajos desde la crisis pandémica de 2020. Esta circunstancia, junto con la confluencia de varias líneas de soporte en los recientes mínimos, podría favorecer un rebote en el corto plazo. Un cierre diario por encima de los 3,265 euros sería un primer paso hacia la recuperación, mientras que el soporte clave a vigilar es el nivel de 3,06 euros, cuya ruptura podría desencadenar una nueva espiral bajista.